Un barandal no solo se trata de sostener y anticipar accidentes en casas u otros sitios públicos, están dotados naturalmente de la cualidad de la elegancia y la seguridad al encargarse de adornar escaleras y balcones dentro y fuera de casa, que al estar hechas de aluminio son livianas, duraderas y estéticas.
El aluminio es un material resistente a inclemencias climáticas como el aire o la lluvia, convirtiéndolo en un material que no necesita ponerse bajo mantenimiento constante, su colocación es rápida y sin la necesidad de un trabajo de albañilería para ser colocado. Es recomendable por su versatilidad al permitirnos, como artistas de este, dar forma a las ideas propuestas e ideas que garanticen la seguridad ante todo del cliente.
Un 80% de los barandales en la ciudad de México están hechos de aluminio reciclado, en México, aproximadamente se tiran 180 latas al año por persona, si de éstas se reciclaran 10 se ahorrarían 150 millones de pesos anuales en materias primas. Separando los desechos metálicos y ubicando los centros de acopio más cercanos, damos nueva vida al aluminio en lugar de generar más basura como en este caso en forma de barandales, canceles o domos.
Basta con una limpieza con alcohol para mantenerlo limpio, dotan a los espacios de elegancia y seguridad y principalmente equivalen a 80% de la producción de aluminio reciclado que puede ser encontrada, otra opción verde ante las elevaciones de temperatura.